Convivir con la naturaleza (foto de Jaime Cristóbal López)

viernes, 26 de octubre de 2012

¿Por qué andan algunas personas durante el sueño?

Dos son las partes de nuestra mente que dirige nuestros movimientos y acciones. La una se ocupa de todas aquellas cosas que ejecutamos con plena conciencia de lo que estamos haciendo, y la otra de las que efectuamos sin darnos la menor cuenta de ellas.

Si nos fijamos en ello, notaremos que practicamos una porción de actos en los que nuestra voluntad no interviene para nada. Por ejemplo, no se nos ocurre pensar en respirar, y, sin embargo, lo hacemos constantemente; ni en mover nuestro corazón, y, no obstante, no se para mientras dura nuestra vida. Además hay algunas cosas que aprendemos a hacer tan a la perfección, que las ejecutamos después de una manera automática. El andar, verbigracia, es una de ellas: cuando éramos pequeñitos no sabíamos andar; aprendimos después, gradualmente, hasta nos acostumbramos de tal suerte, que nos movemos de un lado para otro sin que nuestra razón intervenga apenas en ello.


Los actos de esta naturaleza son los que algunas personas pueden efectuar durante el sueño, porque la mente está tan acostumbrada a es ejecutarlos que no necesita de nuestra intervención consciente para ponerlos en práctica.

Así, pues, si algunas personas caminan durante el sueño es porque una parte de su mente se halla despierta, mientras la otra permanece dormida. Lo más curioso del caso es que, precisamente por estar dormido el sujeto y no tener conciencia de sus actos, puede caminar por sitios en extremo peligrosos, de donde la tensión nerviosa haría caer probablemente si estuviese despierto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario