Convivir con la naturaleza (foto de Jaime Cristóbal López)

jueves, 18 de octubre de 2012

Ciclo Cardiaco



El corazón es el motor que bombea la sangre a través del cuerpo, este sigue una sucesión cíclica cuyas faces comienza con la sístole auricular, estas faces son las siguientes:

Sístole auricular: la onda de contracción se propaga a lo largo de ambas aurículas estimuladas por el nodo o nódulo sinusal o sinoauricular. El corazón tiene el manejo automático-eléctrico pero por otro lado las válvulas y las cámaras se abren y cierran de acuerdo a la diferencia de presiones que la sangre tenga en cada una de ellas. El ventrículo tiene sangre en su interior proveniente de la diferencia de presiones en cuanto a que hay mucha sangre en las aurículas y poca en los ventrículos y eso hace que las válvulas se abran y pase la sangre de las aurículas a los ventrículos, luego al final para ayudar a la poca sangre que queda en las aurículas a que pasen al ventrículo se produce la llamada sístole auricular.


Sístole ventricular: comienza a contraerse el ventrículo, con aumento rápido de su presión. En ese momento se cierran las válvulas tricúspide y mitral para que la sangre no refluya hacia las aurículas y el aumento de presiones que sobreviene hace que se abran las válvulas semilunares aórtica y pulmonar y que pase la sangre hacia la aorta y hacia la arteria pulmonar produciéndose el primer tono de los ruidos cardíacos.


Aumento de la presión en los ventrículos; las válvulas semilunares se mantienen cerradas hasta que la presión de los ventrículos se equilibre con la de las arterias.

Cuando la presión intraventricular sobrepasa a la de las arterias, se abren las válvulas semilunares y la sangre se dirige por las arterias aorta y pulmonar.

Diástole ventricular: los ventrículos entran en relajación activa, su presión interna es inferior a la arterial por lo que las válvulas semilunares se cierran produciendo el segundo ruido cardíaco.

Descenso de la presión con relajación de las paredes ventriculares, las válvulas tricúspide y mitral siguen cerradas (la presión ventricular es mayor que la auricular) por lo que no sale ni entra sangre en los ventrículos; aunque sí penetre sangre en las aurículas al mismo tiempo.

La presión intraventricular es inferior a la auricular porque la aurícula se va llenando de sangre lo que produce una diferencia de presiones con lo cual se abren nuevamente las válvulas tricúspide y mitral y se reinicia el ciclo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario